Sunday, April 13, 2008

A ese Principe De Percia



Kisiera platicar con usted como si fuese en esto que llaman vida, mi uniko secreto...komo si me transportara a un lugar donde ya kaducaron la normalidad, la ignorancia y las ideas tan comunes y corrientes como los dias que existen en esto que vivo de paso que se llama "vida cotidiana"...pero eso eso si...muy lejos de mi mente clausurada, restringida, inmensa y espiritual...porque mi espiritu tiene conexion con mi mentecita que vuela a donde usted nunca, le apuesto, nunca se ha atrevido a explorar...perdoneme se me ha venido derepente esa, esa que solia ser yo...kiero ke sea lo ekivalente a el Pricipe de Percia, al Gerrero Mortal, imaginarme que en la vida existe mas alla de las fronteras entre el Cielo y Roma...en compania suya por supuesto...irnos a explorar un caso, algo sobrenatural, claro, para esos los Humanos, no para "nosotros" usted ya siendo ekivalente al principe de Percia, como se lo acabo de mencionar y yo...a Cleopatra en sus tiempos de Poder y Gloria, ser para los humanos lo ke ella era para sus esclavos y sus quereres, una Diosa...Manipular con destreza kualkier horizonte en busca de...un rato okultos en las cavernas internas donde no se magnifiquen los poderes, donde Nuestro Senor destino Ponga un alto y nos obligue a hacerle fiel, a cambio de lo kontrario de Riqueza Material y kordura...Despues de luchas contra esos demonios vestidos de Ninfas, buscando provecho de lo que nosotros defenderemos a capa y espada, despues de que lastimen la maldita piel humana, y sangre, despues de incrustar cristales de fierro entre los musculos y nos duela cada movimiento...despues de eso...descansare disfrutando de la gloria, y del triunfo que habremos conseguido despues de ese dolor, como castigo o fuerza, que nos ha dado el Senor Destino, sabiendolo merecido o no... yo le sonreire y le dejare kitarme la armadura para curarme las heridas de la piel como uniko companero, como unika alternativa, como la unika salida, a continuar y seguir, a seguir cumpliendo esas malditas misiones que bendeciran nuestros nombres al convertirse en historias, mientras cura la sangre al vivo fuego y calor, dejare que fuerze al cuerpo a compenetrar cada particula viviente y sanar, atar arapos a las orillas, me dejara reposar recargada a la piedra humeda y fria a mi espalda quebrantada, cerrare los ojos un momento mientras disfruto del dolor, sin dejar la sonrisa y le besare la mejilla, llena de un inmenso agradecimiento sabiendo que quiza en algun momento aun en contra de nuestros mandamientos, El Senor Destino Dira...si es su vida o es la mia...